Después de sentar las bases sobre bioseguridad y bioprotección, vamos a dedicar algún rato al protocolo de convivencia, el cual en cierta manera puede garantizar o sostener la bioseguridad y bioprotección de quienes habitan el espacio del wetlab.
Durante octubre a noviembre de 2019 se realizaron sesiones semanalas abiertas moderadas por Laura Benitez con la idea de compartir preguntas, debates y propuestas para elaborar un protocolo abierto para el uso del wetlab. Este espacio comenzó con preguntas, de la misma manera que comenzamos este blog. Y son preguntas que tienen que ver con la ética y los cuidados:
“Un espacio como el wetlab nos interpela a pensarnos no sólo desde un _estar-en_ sino desde un _estar-con. ¿A qué tipo de responsabilidades nos enfrenta el trabajo y/o experimentación con biomateriales? ¿Qué significa responsabilidad en el contexto contemporáneo? ¿Sigue estando la responsabilidad ligada a un marco deontológico? ¿Es posible pensar una responsabilidad no basada en el deber? ¿Cómo operar con protocolos que ficcionan una suerte de realidad inmutable? ¿Es posible seguir sosteniendo discursos feministas y cosificando a otras entidades para nuestro beneficio? ¿Cómo sostenemos nuestras contradicciones? ¿Cómo operamos desde ellas? ¿Se puede reformular una ética mínima con presupuestos no antropocéntricos? ¿Qué hacemos y qué no hacemos en un espacio compartido de experimentación?”
De estas sesiones salió un borrador de protocolo, que un no está público. Lo hemos retomado durante el mes de Diciembre con la idea de afinarlo y poder sacarlo a la luz. Realizamos un primer encuentro en el que participamos Laura Benítez, Vanessa Lorenzo (que en ese momento se encontraba haciendo la residencia BioFriction), Anoushka Skoudy (asesora científica de las residencias Biofriction), Ludovica Michelin encargada de la parte de investigación de Hangar, Lluis Nacenta director de Hangar, y el colectivo residente del wetlab Gaia Leandra y, quien habla, Ce Quimera. Montamos y desmontamos el primer borrador, cruzamos cuestiones éticas con responsabilidades legales, salieron conceptos como descajanegrizar, dando una vuelta al open the box de la ética hacker. Continuaremos trabajando en el protocolo y esta semana aprovecharemos la estancia del colectivo KinLab para hacer una nueva sesión. Esperamos tener a fin de mes un primer borrador publicable de este protocolo.
Algunos referentes que se tomaron para el debate fueron, DIYBio: un espacio que proporciona una plataforma abierta para compartir las iniciativas de DIYbio y aprender sobre y de otros; fomentando oportunidades y potenciales donde la comunidad DIYbio pueda conectarse, reunirse, apoyar y trabajar juntos. https://diybio.org/safety/. Cuentan con un código de conductas: https://sphere.diybio.org/about/code-of-conduct/ y unos valores bien definidos (https://sphere.diybio.org/about/philosophy/#our-values) que pueden servir de base para pensar nuevas formas de vincularnos. De aquí como base, pero creemos que el wetlab tiene unas especificidades propias que no aparecen en espacios DIYBio…espero que podamos trasmitirlas en este nuevo protocolo. Hasta aquí a donde hemos llegado, en unos días tendremos más material rico.